Elaborar un agroquímico con ingredientes naturales, como plantas, residuos orgánicos, etc. que sea efectivo, de bajo costo y no tan toxico como el de la competencia, para su venta futura en nuestra región y comunidades de sus alrededores, (para empezar), y conseguir que las personas queden satisfechas con su uso y logremos sustituir paulatinamente los agroquímicos industriales con los nuestros.